Para lograr este objetivo, se utilizan instrumentos especializados.
Antes de la colocación de los implantes finales, se utilizan implantes
de prueba para estar seguros de que la cadera tenga una buena
estabilidad en toda la amplitud de movimiento funcional y que la
longitud de las piernas sea la misma.
9. Cuando se completan todas las preparaciones óseas, se colocan
los implantes finales. Muchos de estos implantes no necesitan fijación
con cemento, lo que permite que puedan soportar peso de inmediato. Por
el contrario, si su calidad ósea no es óptima, su cirujano podría
tener que emplear implantes fijados con cementos.
10. Al finalizar la cirugía, se cierra la herida quirúrgica por
capas mediante suturas reabsorbibles. Se coloca un vendaje estéril y,
dependiendo de las preferencias de su cirujano, se podría colocar un
drenaje quirúrgico.
11. A continuación, se le llevará a la sala de recuperación,
donde se le supervisará cuidadosamente. La mayoría de los pacientes
pasan de una a dos horas en la sala de recuperación dependiendo de
la rapidez con la que se despiertan de la anestesia.
12. Es normal sentir dolor después de la cirugía de artroplastia
total de cadera. Esto se controlará con medicamentos analgésicos
siguiendo las instrucciones de su cirujano. La mayoría de los
cirujanos utilizan una combinación de opciones terapéuticas para
controlar el dolor. A menudo comienza antes de la cirugía y continúa
después de la misma. Es importante que sea proactivo en el control de
su dolor.
13. Cuando esté totalmente despierto, pasará a su habitación del
hospital y, en la mayoría de los casos, se podrá incorporar el mismo
día de la cirugía.
Aunque el cirujano adaptará la cirugía a sus necesidades concretas,
esto le ofrece una idea de la serie de acontecimientos que acompañan a
un procedimiento estándar.